Los ciberdelincuentes pueden usar Internet como una herramienta para estafar a las víctimas desprevenidas. Las estafas en Internet se presentan en muchas formas, incluidos los correos electrónicos que intentan engañarte para que entregues información financiera, ventanas emergentes cargadas de malware y mensajes de redes sociales diseñados para generar relaciones románticas falsas.
Internet es una forma útil de llegar a una audiencia masiva sin gastar mucho tiempo o dinero. Un sitio web, un mensaje en línea o un sitio de redes sociales puede alcanzar grandes cantidades con un mínimo esfuerzo. Es fácil para los estafadores hacer que sus mensajes se vean reales y creíbles y, a veces, difícil para los inversores distinguir entre realidad y ficción.
Si una promoción de inversión capta tu interés, investiga la “oportunidad” antes de proporcionar tu número de teléfono y dirección de correo electrónico. De lo contrario, puedes estar preparándote para ser blanco de fraude de inversión.
¿Qué puedes hacer para reducir tu exposición potencial a las estafas de Internet? Esto es lo que necesitas saber sobre los fraudes online y los pasos que puedes seguir para protegerte.
Los fraudes online continúan evolucionando y pueden variar ampliamente. El término generalmente se refiere a alguien que usa servicios de Internet o software para defraudar o aprovecharse de las víctimas, generalmente para obtener ganancias financieras.
Los ciberdelincuentes pueden contactar a las víctimas potenciales a través de cuentas de correo electrónico personales o laborales, sitios de redes sociales, aplicaciones de citas u otros métodos en un intento de obtener información personal financiera u otra información valiosa.
Muchas estafas de Internet exitosas tienen finales similares: las víctimas pierden su propio dinero o no reciben los fondos que el estafador prometió.
Cualquiera que use un dispositivo habilitado para Internet podría ser víctima de un fraude online, pero los millennials pueden ser más vulnerables a perder dinero.
Entre las personas de entre 20 y 29 años que denunciaron fraude, casi el 40 por ciento informó que perdió dinero. Eso se compara con el 18 por ciento de las personas de 70 años o más que informaron haber perdido dinero debido a fraude. Pero las personas de 80 años o más tienden a perder más dinero: la pérdida promedio reportada fue de 1,092 dólares en comparación con 400 dólares para personas de 20 a 29 años.
Los delincuentes han ideado docenas de formas de engañar a las víctimas a través de Internet. Aquí tienes los tipos más comunes de fraudes.
El phishing es una estafa común, y que costó colectivamente a las víctimas más de 48 millones de euros el año pasado.
¿En qué consiste?
Un estafador te enviará un mensaje de correo electrónico que parece provenir de una fuente legítima, como un banco, un sitio de redes sociales o una tienda en línea, por ejemplo. El mensaje intenta engañarte para que proporciones datos personales valiosos y confidenciales, como contraseñas, números de tarjetas de crédito e información de cuentas bancarias.
Por ejemplo, puedes ser dirigido a un sitio web que parece legítimo, pero que se configuró solo para capturar tu información.
Los correos electrónicos fraudulentos generalmente se escriben en un tono urgente. A menudo, contienen banderas rojas como faltas de ortografía, mala gramática, demandas urgentes con amenazas de consecuencias financieras y logotipos que no se ven bien.
¿Cómo protegerte?
Para protegerte del phishing debes tener en cuenta una serie de consejos.
Si no estás seguro de si un correo electrónico es legítimo o no, ve directamente al sitio web oficial de la compañía en una pestaña diferente, sin hacer clic en los enlaces dentro del correo electrónico sospechoso.
Como regla general, nunca hagas clic en los enlaces de estos correos electrónicos, no respondas a los correos electrónicos, intenta darte de baja y no proporciones información personal.
Las falsas promesas de préstamos a través de Internet son otro de los fraudes cada vez más extendidos.
¿En qué consiste?
A través de páginas web y anuncios en Internet, los ciberdelincuentes nos ofrecen atractivos préstamos con el objetivo de engañarnos para que solicitemos uno y de esa forma robarnos dinero y hacerse con nuestros datos personales.
¿Cómo protegerte?
Para protegerte de esos préstamos falsos debes aprender a identificarlos. Para ello, ten en cuenta estas recomendaciones:
Usando diseños y diseños sofisticados, los cibercriminales pueden crear y publicar sitios web de minoristas falsos que parecen genuinos o que replican sitios web de minoristas existentes.
Los sitios de compras falsos pueden ofrecer ofertas que son demasiado buenas para ser verdad. Por ejemplo, puedes encontrar marcas populares de ropa y productos electrónicos caros a precios muy bajos.
¿Y si compras? Puedes recibir el artículo y descubrir que es falso, o puedes que no reciba nada en absoluto.
¿En qué consiste?
A través de este fraude nos hacen creer que accedemos a una tienda online legal pero lo que persiguen es robar nuestros datos o nuestro dinero. Nos presentan ofertas irresistibles y, una vez realizado el pedido, no recibimos el producto o, si lo recibimos, se trata de una falsificación.
¿Cómo protegerte?
Para protegerte de esta estafa online debes:
Seguro que a muchos os ha aparecido un anuncio mientras estáis en el ordenador indicando que está infectado con un virus, que debes apagarlo y contactar con el servicio técnico a través de un número que te indica en ese aviso. Este es el fraude del falso soporte técnico.
¿En qué consiste?
Si llamamos al número que nos indican, pueden pedirnos dinero por una falsa reparación de nuestro ordenador o pueden instalarnos programas maliciosos con los que los ciberdelincuentes accederán a nuestra información personal y realizarán acciones ilícitas o maliciosas desde ese dispositivo.
¿Cómo protegerte?
Para protegerte de esta estafa: